“Es posible, porque queremos, porque podemos y vamos a lograrlo.” Frase que se encuentra pegada al frente de nuestro salón de clases de 3° y 4°, aula multigrado de la escuela de San Lorenzo Alto (caserío de Cajamarca). La educación es uno de nuestros principales retos como país, lo sé, muchos lo sabemos. Querer ser parte activa de este reto, desafía, hasta atemoriza; con mis niños somos conscientes de ello, por eso nuestro equipo se llama “Los Luchadores”: trabajamos en una lucha con mucho esfuerzo, perseverancia y amor (con sus propias palabras), por algo que debe ser un derecho y no un privilegio.
Que nuestro sistema educativo es complejo, eso también lo sabemos muchos. ¿Y quién debe tomar acción? Cada uno de nosotros, ciudadanos, desde nuestro rol, desde nuestra profesión, la responsabilidad es de todos… Para proponer de manera apropiada hay que entender, para ello debemos involucrarnos y qué mejor manera de involucrarnos que siendo parte del corazón del sistema: estar en el aula, ser docente. Si a esa claridad le sumamos vocación y pasión por servir, así como una buena dosis de sentido de posibilidad, tenemos un resumen de mis razones para postular al Programa de Liderazgo de EnseñaPerú.
Una vez dentro es donde te das cuenta de que no hay excusas, no puede haber excusas: por ellos. Reafirmas lo complejo del sistema, el sentido de posibilidad llega a verse cuestionado; conoces la famosa brecha educativa en persona, te cuestionas lo que pueden hacer tú y tus capacidades; te observan, te escuchan, te preguntan y te ves en ellos, los reconoces y definitivamente: no puede haber excusas. Continúas y todo lo que puede parecer adverso va tomando una forma distinta, o mejor dicho vas impactando y trabajando porque no sean obstáculos, vas liderando dentro y fuera del aula (reuniones de padres de familia, capacitaciones a docentes), vas gestionando (solicitudes, recepción de alimentos, uso de materiales), todo con mucha humildad y respeto. Enseñas y aprendes más, mucho más.
El camino que decidí tomar es diferente al de muchos colegas administradores, para mí, un camino retador (muchas veces incomprendido) y, sobre todo, gratificante y coherente. Me ha tocado: independizarme, mudarme de ciudad, compartir departamento con personas muy diversas (compañeros que son un apoyo incondicional), vivir de lunes a viernes en el local comunal de mi caserío, cambio de clima, de paisajes y comodidades, ser parte de lo que fue por muchos años una escuela unidocente y así empezar a entender, siempre cuestionando y disfrutando.
Si buscas una experiencia en la que se ponga a prueba tu liderazgo de manera constante; en la que el poder adaptarse sea crucial para continuar; en la que tu sensibilidad se desarrolle y la descubras en su máximo potencial; sumándole a todo esto, el que tu trabajo consista en tener en tus manos una de las mayores responsabilidades todos los días: la educación de niños y jóvenes (así como la de sus entornos más cercanos). Si lo quieres con convicción, postula al PDL de EnseñaPerú, el ser parte de este movimiento es la manera en la que muchos de nosotros tomamos acción y trabajamos día a día sabiendo que “Es posible”, porque queremos, porque juntos podemos y movilizaremos voluntades y mentalidades para lograrlo.
Estefanía Welsch
Profesional de EnseñaPerú 2014-2015
Administradora de la Universidad de Lima
Presidenta de Voluntades 2013